Una Cita con Dios
Ojeda, Raul Ha fallecido su tío. Pasaban los días, -tan monocromáticos. El matiz solía ser gris. El protagonista vive inmerso en un hoyo pequeño, con elevadas temperaturas y punzadas sobre su atormentada conciencia. -¿Serán los síntomas de la autocompasión? -Preguntaba.
Lloraba sin cesar. Rasgaba sus vestidos. Levantaba su mirada acongojada, y en presencia de un hermoso cielo estrellado, volvía a preguntar con ímpetu: -¿Por qué Dios mío? -Tantas person...